sábado, 18 de junio de 2011

Te veo delgada, felicidades!

Hoy, estaba esperando a una persona en el centro. El bendito centro, tiene la hermosa característica de que te encuentras a mucha gente y más, quienes no pensarías que te encontrarías nunca más.
Pues cual fue mi sorpresa que después de darle varias vueltas a la zona peatonal, de hablar por teléfono como loca y quedarme de ver con 3 personas y, que los tres me dejaran plantada, decidí esperar a otra persona en una terraza lejos de las públicas, las mas asediadas. Y para mi mal fortuna, un personaje realmente incómodo estaba ya instalado en la terraza de al lado, justo al lado mío! Y ni como cambiarme, porque ya había dirigido su venenosa mirada hacia a mí.
El calor estaba insoportable y la verdad es que un frappe contiene miles de calorías por tanta azúcar que los compone, así que decidí por un té frio de menta, nada mejor para ese sol directo. Y como la verdad me eh estado portando delo mejor, decidí desbalagarme con un panino de la casa, que lleva nada más y nada menos que: mayonesa (prohibida), jamón de pavo (no amigo, pero tampoco total enemigo), salami (enemigo) y un aderezo tipo chimichurri argentino rebosando el sándwich italiano perfecto. El punto es que lo estaba disfrutando en su máxima expresión, porque es el único embutido que me voy a comer consciente y sin discreción en este 2011.
Después de atascarme el panino perfecto, con la bebida perfecta y leyendo el periódico perfecto ( bueno, medio perfecto porque yo no estoy ahí! (ardida!)), se me acercó el personaje este, ataviado en soberbia con un distintivo toque de altanería se acercó y me dio su diálogo de buenas costumbres e invitación a un evento familiar (error numero 1) y no parar de hablar para devolverle por lo menos el saludo (error numero2) hasta que tomó aire y terminó con la frase que me arrancó la sonrisa incrédula: “Te veo muy pero muy delgada, te felicito! Te ves IN-CRE-I-BLE!”.
La verdad, cuando alguien no te cae del todo bien, hasta dudas de sus cumplidos, o quizá ese sentimiento es desencadenado de mi falta de confianza en segundas dosis hacia las personas.
El otro punto es, en verdad estoy “muy pero muy delgada”? No veré como enferma? O ya me estoy poniendo extrema en mi pregunta? Pues no sé, a lo que voy es: Porque nadie me felicitaba cuando estaba gordita? Tenía mas arte ser gordita! Conservar esas curvotas no era cosa fácil! Ni escasa inversión!
Lo de hoy, es estar delgada, eso me queda claro, tanto por salud física y mental, por estética y todo lo demás que ya hemos comentado.
Pero en verdad, hace mucho que nadie me felicitaba, menos por no estar gorda, menos usando la palabra “delgada”.
La otra que me sucedió, fue nada más y nada menos que con mi IFE. No me dejaban pasar porque según el guardia de un casino en la ciudad, ya no me parezco! Hasta que le tuve q enseñar la “evolución” en fotos de otras credenciales y me dijo el “Pues felicidades, se ve mejor asi! … y cambie su IFE, por favor!”
Ahora, el momento del ego va aquí: se siente increíble que la gente note que tanto sacrificio de no comerte esas papas o pastelitos en la tarde y que el haber dejado el refresco y optar por el agua es realmente satisfactorio. Los cambios no se hicieron de un día para otro, a decir verdad, los últimos días han sido difíciles, me encantaría tragarme todo lo que no debo ni puedo por aquello de “llenar el estomago por el corazón vacío”, pero tomé el toro por los cuernos y no por la cola, así que me aplique de la mejor manera, mentalizándome que la disciplina debe de ser el valor número uno en la lista y seguir con las limitantes y el ejercicio.
Desayunando lo correcto en porciones correctas, y haciendo las comidas y cenas de la misma forma, no mal pasándote, beber y comer solo cosas naturales, nada de refresco ni esas cosas que te llenan el estomago de azúcar, almidones y porquería y media, todo eso ayuda, pero lo que definitivamente te hace el favor del mundo, es hacer ejercicio!
Mover las carnes es lo mejor que puedes hacer, por lo menos 40 minutos al día de caminata cambiará hasta esos horribles dolores de piernas o espalda que pueden destrozarte al final del día.
Así que, espero que para finales de este 2011 si alcance a llegar a los 70 y no años! Si no kilos! Todo sea por una mejor expresión con el : “ Te veo delgada, te felicito!” y claro que cambiare mi IFE, es una promesa!